HUMITOS

Te lo digo en tu idioma

sábado, 21 de febrero de 2009

Una mirada Zen


Edén , paraíso perdido...
busca dentro mio un amanecer.
Rescata del cielo mi sueño preferido.
Construye mi esperanza,
ayúdame a creer..!
Que soy más que la nada,
que estoy por un porqué;
Que el mundo está en mi palma
y el amor en mi piel.
Que cuando muera sea libre
para volver a nacer.


HUMO





7 comentarios:

  1. Ese cielo prometedor
    tan blanco...
    tan puro

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  2. Hola Humo... me encanta tu blog.. tienes poemas y escritos tan bellos. Te envio un caluroso saludo desde Lima.

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  3. Muy bellos poema, para volver a nacer...

    me entrego a el en silencio..

    saludos fraternos un placer leerte y un lujo seguirte..

    un abrazo inmenso con mucho cariño

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  4. que bello lugar..no lo he leido profundamente pero megusta el ambiente que emite sin duda lo visitare
    saludos!!!
    gracias por compartir

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  5. Pasando por el blog de Adolfo, vi este espacio y no pude dejar de detenerme.
    Bellos y profundos poemas.

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  6. María, pero que belleza de ensayo este tuyo que nos ofreces en esta entrada, en realidad todos tus poemas supuran sensibilidad a borbotones, de verdad que es un placer leerte, te dejo un fuerte beso y mis mejores deseos para este domingo de carnaval, ... Alexis

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  7. Que soy más que la nada,
    que estoy por un porqué;
    Que el mundo está en mi palma
    y el amor en mi piel.

    brutal .^

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Y esta palabra, este papel escrito
por las mil manos de una sola mano,
no queda en ti, no sirve para sueños,
cae a la tierra: allí se continúa.

Pablo Neruda

Gracias por visitarme y anidar en mi, la primavera.

HUMO

EL EXPLORADOR...by Humo.

EL EXPLORADOR...by Humo.
Un mundo por descubrir.

LOS HIJOS

LOS HIJOS
Son la parte más bella de mí...
Los hijos son el único, puro y verdadero e incondicional amor
que existe...


UN DÍA DE FURIA

UN DÍA DE FURIA
Tengo mi temperamento...
Me arrancaste la sonrisa de la cara
a girones, con palabras nauseabundas.
No mediste consecuencias,
poco te importó el impacto de tal acto.
Sentimientos rotos,
dolor agudo y sangrado.
Me quebré por dentro
y afloró la lágrima,
la rabia, la impotencia.
Abriste la puerta equivocada
e invadiste mi espacio
como un ratero,
escupiendo el odio visceral
de tus entrañas
a lo más sagrado, que es, un hijo.
Fué un golpe bajo, inesperado.
Yo, no lo merecía.
Y vos... vos, me das asco!